El alud que sepultó trece casas y se llevó vidas humanas en Alto Loaiza de Orosi desnuda una vez más, nuestra inmadurez en prevención de accidentes ocasionados por lluvias. La cantidad de agua que ha caído en las últimas semanas han provocado varios deslizamientos e inundaciones, algo habitual en nuestro país en la época de lluvias. Pero... si sabemos que cada año hay derrumbes, e incluso se conocen las áreas de más alto riesgo... ¿por qué siguen ocurriendo? El geólogo Ronald Mora, de la Universidad de Costa Rica, señala uno de los problemas básicos de nuestro enfoque: “la comisión nacional de emergencias, que se ha dedicado a atender emergencias, a atender pos - desastre, reaccionan para ir a juntar muertos básicamente hasta ahora la ley le permite sin embargo está atada de manos presupuestariamente”. Según el experto, lo que el país necesita es una gestión integral del riesgo, en donde se integre la prevención y la atención posterior al desastre. Además, es urgente que dejemos de empeorar la situación que ya es crítica. Por ejemplo, no permitiendo que nadie vuelva a vivir en áreas que sabemos que son de altísimo riesgo, como el lugar donde estaban las viviendas aterradas de Orosi. El geólogo Ronald Mora agrega: “lo que hemos creado con el crecimiento poblacional, la ubicación de asentamientos, desordenada en este país y sin planificación de uso del terreno es aumentar la vulnerabilidad”. y cada vez que hay un desastre tenemos la misma alternativa: o volvemos a llorar los muertos, poniendo cara de “yo no sabia que esto iba a pasar” o comenzamos en serio a prevenir este tipo de desastres en costa rica Que, hay que decirlo una vez más, no son desastres naturales, porque no es natural que haya un desastre. El geólogo Mora concluyó señalando que es necesario dotar a la Comisión Nacional de Emergencia de un presupuesto suficiente para que pueda trabajar con libertad, e iniciar un proceso de educación en prevención de emergencias.